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#hazquealgosuceda, actitud, cambio, desarrollo personal, esfuerzo, Felicidad, objetivos, positivo, retos, superación
Esta vez os traigo un vídeo (en castellano). Lo he encontrado en mi TL de Facebook, colgado por un compañero de la Universidad y como no lo voy a explicar mejor, prefiero ponerlo.
Habla de la «aletargante» zona de confort. Te invita a huir de ella y a que pases más tiempo en la zona de aprendizaje. Una vez dado este paso, sólo te falta atreverte a dar el salto a la zona de pánico. No es fácil, pero a mí me encantaría hacerlo.
Tal y como tenemos diseñada la sociedad, ya con pasar a la zona de aprendizaje brotan los agoreros que te intentan frenar: «pero para qué vas a cambiar», «y si te sale mal», «acuérdate que tu padre también intentó…» No les escuches, en el fondo a ellos también les encantaría atreverse 🙂
Personalmente, creo que justo, justo estoy adentrándome en la zona de aprendizaje: me he lanzado a cambiar de trabajo porque quería un reto y me ilusionaba la empresa a la que iba, he retomado el estudio de idiomas, me he lanzado a dar la cara en un blog, sigo intentado viajar y conocer otras culturas, me he independizado y tenemos un perrito en casa (que también implica cambios, jeje)… Viéndolo así, no tengo demasiado mérito. Salvo por una cosa, dí el primer gran paso: me auto-diagnostiqué «acomodamiento incipiente» y decidí cambiar cosas.
Ojalá pronto dé el salto a la zona de pánico. Tiene pinta de que es entretenido. Al fin y al cabo, en esta vida lo arriesgado es no arriesgar. Tienes un bonobús y no sabes cuántos viajes te quedan. Y tú, ¿te atreves a soñar?
Esta muy bien saltar de una zona a otra, pero siempre teniendo en cuenta la edad y
si llevas o no llevas contigo una mochila vacía o llena. Antes era mas fácil dar esos
pasos, pues siempre tenias la posibilidad de otras opciones, pero hoy en día si llevas mochila cargada, mas vale pájaro en mano que ciento volando.
En mi caso creo que la zona de confort no ha existido nunca, entre otras cosas porque el día a día, con todos sus imprevistos unas veces buenos y otras malos, no tienen nada de confortables y es lo que mas me puede gustar, aunque sea cansado,
por la incertidumbre, por no ser ningún día igual y porque es lo que tiene el ser autónomo en TV y odiar la rutina.
Fui la única persona que teniendo mi pareja un trabajo seguro,estable, bueno y bien remunerado, llevando una mochila bien cargada (créditos, casa, coche, 2 hijos) casi
le obligue que diera el salto a la zona de pánico y nunca mejor dicho, pues era una
nueva empresa sin garantías de continuidad y seguridad, pero una cosa si que tenia clara, de lo feliz que iba a ser el con ese cambio y el tiempo por suerte y con gran esfuerzo por parte de todos, afortunadamente me dio la razón. Hoy tal y como están
las cosas, no se si lo volvería hacer.
Por cierto se me ha olvidado decir que el vídeo de Atrévete a soñar, es precioso y
muy bien hecho y que a mis 56 años, he realizado muchos de mis sueños y espero
seguir realizándolos, por muchos años.
Muchísimas gracias por tus comentarios! Siempre hacen ilusión y si vienen de un ser querido, mucha más.
Creo que tú la zona de confort la abandonaste hace tiempo. En cualquier caso, estar «puteado» también puede ser zona de confort si el origen es conocido y el alcance también. Pero como bien dices, tú arriesgaste. Mejor dicho, vosotros arriesgasteis y os ha ido muy bien. Es un ejemplo más. Claro que no es fácil, pero merece la pena.
Otro día hablaremos de lo que cada uno decide llevar en su mochila (ver «Up in the air» de George Clooney) Llevarla vacía te permite ir más rápido, llegar más lejos. Pero de qué te sirve llegar si en la meta descubres que no tienes nada. Cargarla de emociones, relaciones, compromisos…hace que pese y te ralentiza la marcha, pero si abres la mochila siempre tendrás cosas importantes de las que echar mano.
Un beso y a seguir cumpliendo sueños!
Pues para mi todos los días son de confort y cada mañana es como un salto al vacío, parece una incongruencia, pero es así, ya sabes Álvaro, amanece cargado de felicidad y procura llegar a la noche sin haberla gastado toda y si la has gastado, no te preocupes, mañana es un día nuevo, es volver a nacer, otra oportunidad, otro salto al vacío pero siempre cargadito de felicidad. Se dice fácil pero con el tiempo te acostumbras
Me encanta soñar!!!. Me apasiona la zona de aprendizaje!!!! Muy bueno el vídeo…
Gracias Maribel! Disfruta de la zona de aprendizaje, pero el gran paso es saltar allá donde ocurre la magia, a la zona de pánico. Cuando lo hagas, compártelo!